El Porno: Liberados, Depilados y Meados / Por Marcos Durán

A mi me encanta el porno! y es que a todos nos gusta la verdad.
A mi me va más el amateur, no el de las grandes productoras con el empecinamiento de convertirlo en algo preciocista. El porno no debería tener guión, porque tenemos la desesperada costumbre de adelantarlo hasta que llega la parte que nos interesa.
Yo quiero que quede claro y como Manifesto que me encanta el porno!
Porque siempre ha sido el mejor compañero de la soledad. El porno me ha salvado del aburrimiento, del stress, de mis histerias y de todas mis arrecheras. Tanto que me dedico a hacer lo que mejor se hacer: Me hago una buena paja.
Que te hagan una paja esta muy bien, pero no hay nada mejor que tener el control de uno mismo.
Que vivan las pajas! deberíamos salir a defender nuestras pajas como defendemos lo político o las religiones.
Me autodefino pornógrafo, porque mi mente piensa en porno las 24 hrs del día! Así pasa por la cabeza de todo el mundo y vamos! que eso no es nada fuera de lo común!
Lo mio no empezó en la adolescencia sino en mi pronta adultez.
Durante mi adolescencia estuve más preocupado por mi homosexualidad que por la masturbación -no tengo problema tampoco en hablarlo- la verdad nunca he sido una “ultraloca” pero me encanta definirme como una “pluma descontrolada”. ( Por aquello de la escritura y por marico).
De chico leía relatos eróticos de una revista que no tengo idea de su nombre que compraba con mucha vergüenza en un kiosko no tan próximo a mi edificio para no despertar sospechas que yo era un consumidor de porno. Yo nunca fui de aquellos que escondía el porno debajo del colchón; y no por autocensura; sino que fui educado en un colegio religioso, entonces pensaba que no era apropiado dejarlas sobre el escritorio. Tampoco jamás pense que ver porno y masturbarme era algo malo. Siempre me gustó y me sigue gustando.
Curiosamente hoy el porno está perfectamente clasificado en mi disco duro externo. Una maravillosa videoteca de la cual estoy muy orgulloso.
La verdad prefiero el porno en películas, porque a mi me gusta la cosa fácil y no tanta suposición ni tanta fantasía, tampoco tanta pensadera.
La primera vez que vi erotismo impreso fue un libro mágico que encontre que se llama el Arte de Amar. Creo que todos ( los de mi generación) – cuyos padres estaban suscritos al otrora círculo de lectores- nos hemos topado en algún momento de la vida con esa maravilla ilustrada. Recuerdo aquellos bellos púbicos finamente rayados a plumilla de distintos calibres impresos a tinta china con los cuales yo deliraba…
Soy fiel amante del bello púbico y defensor de lo que he denominado “belleza salvaje”.  Tengo un fetiche con las axilas y defiendo el crecimiento del vello corporal en hombres y mujeres. Por si no lo saben soy un hombre barbado.
Esto no es una lectura para mariquitas! Es un manifesto de lo que todos queremos leer y que la vergüenza a muchos no les deja contar. Porque yo les dire algo: los genitales razurados, depilados, etc -de verdad-y lo saben dan un poquito de asco.
Porque claro! los poros se abren, y eso es como lamer la piel de un pollo desplumado de los que vienen en bandejitas del supermercado.
Es digamos una apreciación estética muy “a la mode” que algún día les voy a explicar.
Pasados los días entonces se irritan esos poros, se ponen rojos, da picor etc.
Y no me vengan que ese romancce de: yo lo hago por higiene! Sres., Sras. A mi no me huelen mal las bolas.
Las mujeres me cuentan que cuando se depilan se mean la entrepierna! y siempre me ha dado curiosidad; porque claro los pelos vaginales están ahí entre otras cosas para decantar la orina; entonces eso de mear y chispearse a todos lados… No creo que sea lo más conveniente.
Por lo tanto siempre me pregunto: para qué carajos lo hacen?
A mi el tema de la lluvia dorada me parece una práctica totalmente respetable. Pero eso de ir con la entrepierna meada por la vida, me da, no se! la verdad no quiero pensar mucho en eso.
Y como hombre se! que es muy incómodo andar con la ingle razurada. sobre todo que muchos colocamos nuestra paloma sobre la misma y eso causa molestia, picazón, etc.  Cada quien es libre por supuesto de colocar sus genitales como mejor le acomode y se ajuste a su ropa interior.
Como todo en esta vida es cuestión de gustos.
Pero sigamos en el porno y no en los genitales pues no son el asunto de estas líneas.
Después de aquel sublime libro me encontré con el primer empaque de preservativos. En aquel se ilustraba la forma de colocarlo, y créanme que esa imagen del pene erecto dibujado en unos cuantos trazos representa una de las estéticas que más he admirado en la vida.
De ahí en adelante llegó la adolescencia y apareció la revelación: TABOO.
Yo vi la saga de la Guerra de las Galaxias y Taboo al mismo tiempo. Recuerdo que eran los únicos temas que se hablaban en mis recesos escolares. La gente quería ser un heroe intergaláctico como Luke Skywalker,  pero a la vez querían tener la gloriosa paloma de Mike Ranger.
De ahí comenzó el tráfico de betas y VHS’s escondidos en las mochilas del Colegio.
Ir a los Video Clubs y ver aquellos anaqueles que exhibían sus cintas XXX escritas en marcador fosforescente hacían mis ojos saltar de éxtasis.
Les recomiendo algo de esa época: Mai Lin Vs Serena. Unas jevas que se meten en una pequeña bañera color rosa fluor (digna de colocar en un museo porque me parece mas interesante que una obra de Jeff Koons) rodeadas de hombres que se pajean frente a ellas con unas fantásticas mascaras de lamé dorado.
Es que la escena del primer bukkake que uno ve en la vida nunca se olvida! Es mejor que el primer beso que les juro en mi caso no se con quién fue! No fue el primer beso lo trascendental en mi vida, pero sí el primer bukkake que vi!
El porno gay en aquellos años era difícil de conseguir, por lo tanto como mis otros amiguitos gay teníamos que conformarnos con las revistas y pelis hétero.
Hasta que al fin hubo luz detrás del tunel. Ese resplandor se llama Peter North.
Una de mis pelis favoritas hétero se llama The Pillow Man y la protagoniza el Sr. que mencioné; el cual por cosas del destino ya había tenido unas escenas gay durante los 80’s,y para mi asombro es pasivo.
Bueno aquello fue creo mi primera pasión sin control! Peter se convirtió en la fantasía más allá del Nirvana. Cuando volvía alado por el hilo de plata de los libros de Conny Mendez a la tierra estaba Miguel Angel Landa en tanga en toda la filmografía venezolana, Franklyn Virgüez, un moreno guapísimo y otro actor legendario protagonista de telenovelas al cual le decían “Macuto” .
Por supuesto el tráfico de películas no cesaba y recuerdo llegar a casa con más de 10 títulos intercambiados con los amigos ( ahí no importaba nada si eras gay, hétero o lo que fueses) ahí lo que importaban eran  las sinopsis que te contaban de las pelis, y el pensar en cuanto autoplacer podías merecer.
Mientras tanto; a todos nos tocaban la puerta de la habitación con la pregunta del millón de dólares: Fulano que estás haciendo? Seguido de: la cena esta servida ven a comer!!! Una vaina más corta nota que esa!
No era obvio? Uno se estaba haciendo una paja! Porqué no nos dejaron en paz!
Yo no quería comer, yo lo que quería era hacerme la paja!
Les comentaba que yo el porno no lo escondí.
Lo que si escondí: “Todos” y creanme que al que se le fue la memoria con esto que describire a continuación esta muy mal.  “Todos” escondimos una  franela vieja y desgastada que ya no usabamos y servía de contenedor de la gloria líquida y pegajosa de cada paja. Una franela que contenía el ADN de uno. Aquella franela que se ponía dura porque no se lavaba con frecuencia. La mia era blanca y se le dibujaban círculos cromáticos que con los días se volvían amarillos en todos los tonos de amarillo posibles. Algunos de mis amigos usaban sus calcetines. No me caigan a cuentos que usaban servilletas de papel. NADIE se paró en medio de una paja a irse al baño a eyacular en un toilette y menos a buscar papel higiénico. Lo más cerca que teníamos era la inmaculada franelita vieja! Y aclaro lo del papel porque siempre quedaban restos del mismo sobre el glande y eso no era estético para nada.
Si les da asco este relato ; a mi me sigue dando más asco pensar que muchas de ustedes que están leyendo esta historia van meadas en la entrepierna por su interés de andar con la cuca depilada.
Hagan este ejercicio: cuando estén en una reunión cualquiera dejen que esas <voces abominables> salgan de su cabeza. Míren a cualquier mujer fijamente, sonrían y preguntense cuántas tienen la entrepierna meada. O imagínense que no están depiladas.
Respondan a sus interrogantes: o meada o con pelos! como tendrá el coño esta mujer.
Ahora les toca saber lo que ellas responden:  yo me dejo un poquito!!! Yo me hago un Mohicano, a mi novio le gusta como la tipa de la película. Pelos? que asco! y así va la vida, en un complejo enredo y un compendio de estéticas. Todas bellas y maravillosas pero meadas en la entrepierna. sigamos.-
Un dato curioso del porno de aquella época es que era silente. Claro! Quién carajo veía porno con volumen? Ni nosotros, ni nuestra generación anterior veía porno con volumen. Veíamos porno desde la Tv porque no había computadores portátiles ni dispositivos móviles con audífonos. Suponía que había que mantener las buenas costumbres y no andar atormentando a los vecinos con gritos y frases como: Fuck me hard! y Hell yeah!!! porque el porno que consumiamos era irremediablemente norteamericano. Europa tenía otro sistema de video no compatible con nuestros dispositivos de video cintas y lo Asiático lo alcanzamos ya muy tarde.
Es que nos acostumbramos a que en el sexo no se hablaba, no se gemía, no se gritaba ni nada! era una gente que uno asumía que deliraba de placer, de dolor o de algo. Escuchaba uno el sonido de la puerta de la casa cerrarse, nos encontrabamos solos y corríamos a darle volumen a la Tv. Pero a mi parecer perdía el sentido que lo hacía divertido, prohibido. No disfrutamos nunca del porno audible.
Solamente fui 1 vez al porno cine; pero no me gusto! porque me recordo que todos estabamos ahi por soledad. Y yo creo que aunque acompañado, muy casado o ennoviado no se debe perder el gusto de la masturbacion jamás! solo o en pareja o como se les de la puta gana. Masturbarse es Alegría! Yo no conozco a nadie que despues de una paja se ponga triste; pero si conozco a muchos que después de coger salen corriendo.
Aquí en este parrafo se detendrán a reflexionar cuando se encontraron a su parejita en plena paja! no se aterren, no les han dejado de amar…Se estan dando mas amor a si mismos.
Muchos seguimos viendo porno y preguntándole al de al lado cuántas pajas has tenido en un día! y créanme son cifras sorprendentes.
En el caso de las chicas siempre ha sido: o algo de un pecado originalmente concebido miles de años atrás o algo del más allá o extraterrestre. Las mujeres no cuentan sus pajas, entre mujeres no se habla del porno que ven. Es algo que les debe parecer algo intimo supongo…
Entonces en este relato del porno llego el Mesías!
Google y el Santo Grial:
Dividieron el mar en 2, llovió Maná y con él las páginas porno, las páginas de películas porno, las páginas con imágenes porno, las páginas de las camaritas porno, el porno guarro, el porno fresa, el porno como sea, el porno interracial, el porno asiático, el porno hétero, el porno gay, el porno lésbico, el porno trans, el porno inter y cuanta vaina termine en sexual.
Nos empezamos a enloquecer a pajas! Lo compartimos con el de al lado, con el novio, con la novia, con el esposo, con la esposa, con la muñeca inflable, con los anillos para el pene, con los consoladores y con los dildos. Por eso se lo gritamos al mundo y ya más nunca pudimos parar de masturbarnos.
Depilados, con pelos, olorosos y otros no tanto, desenfadados, enclosetados, frustrados, liberados y sobre todo meados!  Demos gracias a cada uno de nosotros por apoyar desde el anonimato de nuestra habitación cuanta fantasia se nos ocurra: como dice aquel sabio proverbio del mercadeo: SIN DEMANDA NO HAY OFERTA.
Marcos Durán
@marcdur

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