Yo te estoy invitando a que tengamos sexo; no a que te acuestes conmigo en la cama de un faquir…
Muchos me darán la razon, otros no tanto…
Yo voy por la vida interrogando a mis amigos acerca de casi cualquier cosa que se me ocurra, y como mis amigos son tan o mas rebeldes que yo, siempre me responden cualquier barbaridad, en función a esas respuestas he decidido desarrollar estas lineas.
Yo no pretendo volcar este relato en una filantrópica lectura. Esto va en función a las redes sociales y esas maricadas. En las vivencias propias y de mis amigos.
Las app existen! Son una realidad, están entre nosotros…
En este planeta azul en el que vivimos , que gira tan rápido las app han convertido en la manera mas eficaz de conocer gente.
Debo aclarar que yo siempre he querido conocer al hombre de mi vida en una biblioteca y no en una discoteca; pero yo no voy a la biblioteca porque las cosas las busco en google y en mis libros. Tampoco voy a discotecas. Entonces estoy muy jodido.
Yo no soy de ir a bares gay, porque a mi edad, siento que me veo ridiculo al lado de tantos jóvenes buen mozos que salen a bailar. Yo bailo muy bien pero con estas canas para donde voy yo a menearme con esos ritmos modernos, además la luz estroboscopica hace que nos vean en slow motion, cosa cual altera aún más mis estados de histeria.
Menos mal que estoy bien claro en esto. Sugar Daddy en un bar de locas jamas!
Pues resulta que yo ando soltero y buscando! Esa es la definición en la que calificamos en las app de dating.
Yo he estado en cuanta red social gay ha existido y si me preguntan no es que me encanta. Vivo muy ocupado, trabajo en un ambiente excesivamente heterosexual, no voy a bares ni a bibliotecas , por lo tanto la forma mas fácil de conocer a alguien es abrirse cuanto perfil uno pueda en una app y aquí les cuento como ha sido mi paso por ellas.
Redes para divertirse, redes para follar, redes de osos, redes de guapos, redes de no tan guapos, redes de ligue, redes de amor, redes de drag, redes de cuanta vaina han inventando yo me voy suscribiendo.
A veces abro un nuevo perfil, duro 1 min en la app y digo ( esto no sirve para nada) y me doy de baja.
Así paso mi vida creando perfiles, abriéndolos y cerrándolos.
Las app que por mirar te cobran tambien las borro – para mi eso es pagar por sexo- y no me escandalizo con el que lo haga pero a mi todavia no me ha hecho falta.
Una vez que decido participar de una app de dating empieza la historia.
La foto que uno decide poner NUNCA (coñisimo de la madre) es fantástica. ¿Porqué? Porque nadie le da like, entonces uno empieza a pensar:
¿Será que salgo horrible?
Aja! No me dan like porque la foto es en blanco y negro y la gente no entiende…
Voy a poner aquella foto que me tomo fulanito cuando nos tomamos un drinks en el lugar aquel y salgo guapo.
Mejor voy a poner la del perfil de facebook porque me dieron like mis amigos a ver si funciona.
Voy a poner la de la playa, que no se me ve mucho el cuerpo, pero que salgo cool en actitud de: “lo mio es el mar y la piña colada”.
Le preguntamos a la mejor amiga que claro! Es solidaria y nos ve con misericordia:
-Marica ¿Pongo esta foto? ¿Salgo bien?
-Marico sales estelar, te ves super bien!
Y así pasamos el día hasta que aparece la foto que uno cree que es la imagen ideal.
Lo siento mi gente, esa maldita foto no existe…
Esa carnada no es tan fácil de conseguir.
Uno decide poner la que uno cree es la correcta, pero esa tampoco es!
Entonces empezamos a rellenar unos cuestionarios con las preguntas mas absurdamente baratas que le han hecho a uno en la historia. (Aquel cuestionario es random para todas las app.)
Empieza el casting de cuanto mide uno, cuanto pesa uno, la raza de uno, el origen del universo y la religión de uno.
Luego preguntan: ¿Qué estas buscando?
Es la pregunta de las cien mil lochas. Yo siempre escribo: El eslabón perdido.( ¡todos me han mandado al carajo!)
Después entras una categoria algo mas intima y preguntan: si eres circunciso, si eres activo, pasivo, versatil, drag, trans, leather, oso, cantidad de pelo en el cuerpo, raza, a que hueles y cuanta vaina hay en la maravillosa sociología homosexual.
Después se ponen a preguntar si uno fuma, si uno ingiere alcohol, poppers, mascota, hijos, etc.
Ahora nos detenemos y preguntan la cosa mas innecesaria que se le puede preguntar a alguien en la vida: hobbie.
Coñuesumadre que clase de ser humano tiene un hobbie? Yo jamás le voy a hacer esa pregunta a ningún hombre con el que salga.
Imagínense el panorama: sales con un tipo, vas a un barcito chevere, el tipo luce cool, educado, con nivel, te gusta y en medio del segundo Martini te dice: yo colecciono carritos de carrera y tu?
– Uno se para y se va.-
Asunto: te vas arrecho y maquinando como ir a pararte frente a esas repisas en su casa y mearle los carritos esos.
Quien carajo en el 2016 tiene un hobbie? A mi me preguntan eso y digo que tejo brazaletes de macramé y se los regalo a mis amigüitos maricas.
Ya anteriormente el tipo te había preguntado el signo del zodiaco, uno se atragantó con el Martini y hasta habíamos hablado de la rueda de la fortuna.
Pero concentrémonos en las categorías de los perfiles de las app de ligue, porque antes de llegar al barcito cool hay que pasar por aqui.
En sus perfiles describen:
– Me encanta la playa, la montaña, el cine, salir a caminar, pasear bicicleta, amo los domingos en familia y soy vegano. La foto que acompaña estos perfiles es una gente medio fit, sudados, o preparándose para ejercitarse, van sin camiseta y unos shorts ajustados.
Hijos de puta!
– Lo mio es estar chilling en casa, amo Game of Thrones y las peliculas de ciencia ficción. Me gusta mucho el chill out y la musica de café del mar. La foto más clasica es un selfie en el carro manejando; pero puede decantar en una visita a Disney con el castillo de las princesas detrás, una comida entre amigos en un restaurante y por supuesto no sabemos quien coño es el tipo en cuestión porque esta sentado en esa mesa con un gentio. Te va a gustar uno del grupo y claro! Ese no es.
Hijos de puta!
– Me gusta ir al museo, compartir con los amigos, leer los best sellers del momento y las actividades al aire libre. Esta foto es con la torre Eiffel detrás, desde lo mas alto de Machupichu, o sentando en el banquito de Mafalda en Buenos Aires.
Hijos de puta!
Pero los que se llevan la banda de bastardos hijos de puta:
– Soy masculino, discreto, bi. No busco nada en serio, relajado. Busco acción para ya.
Aqui me voy a detener porque voy a defender a los hijos de puta de los que escribi anteriormente. La foto que acompaña este perfil va por supuesto sin cabeza porque el tercio dice que es discreto. Esta foto probablemente sea en ropa interior y lo peor es que este ser vivo está depilado lo que lo hace redomadamente asqueroso.
Pero lo que me asombra del caso son los ambientes que rodean estos selfies.
Un closet abierto, desordenado, una cama sin tender, unas medallas colgadas en la pared que se ganó en que se yo que deporte cuando era carajito, un afiche de una moto que le gustaba cuando era chamito y que no se le ocurrio quitar nunca, un corotico religioso entiéndase crucifijo, imagen de un santo, entre muchas mas vainas.
Tambien hay fotos sin cabeza en baños publicos que me genera angustia estar parado frente a un espejo de un baño público haciéndose un selfie en bolas. A mi el selfie del baño me parece poco creativo, pero me encanta ver lo que refleja el espejo: la marca de crema dental que usan, una pastilla de jabón gastada, un corotico con motivo marino, los potes de crema para la cara y esas mariconadas. Porque no descontextualizar estas selfies si hay miles de paredes blancas random en el mundo entero. Tengan mucho cuidado con lo que reflejan sus espejos porque uno tiende a enterarse del entorno que rodea a este ser humano, con eso hacemos un cierre de Gestalt, por lo tanto Next. Bueno, la puesta en escena se trata de eso.
Y uno dice: ¡Coño! ¿me quiero relacionar con gente asi? ¿Realmente? ¿Quiero salir con un hombre que tiene una pastilla de jabón asquerosa en su lavamanos? ¿Quiero salir con un man que la ropa interior parece que se la compro su mamá?
Así pasa la vida del soltero y buscando. Leyendo perfiles y haciéndole zoom a las fotos de los perfiles ajenos a ver si sacamos algo de ahí.
Total que encontramos al fin a alguien…
Una vez que aparece Neo en la Matrix y uno pesca a aquel ser humano comienza lo bueno:
Empieza o empiezan con un Hola!, qué buscas, cómo te llamas, te ves guapo y ya….
Hasta ahí llega la conversación. Días después; como somos guebones le volvemos a escribir al pana y queda uno sin respuesta con el tono ochentero ” tururu” del teléfono de la cantv.
Si te conectas de madrugada es porque llegaste a casa horny, te abriste la única lata de cerveza del refrigerador y claro hay un cachondeo implícito. Vemos perfiles y decimos: – ¡Ay me follo al que sea y ya!
La conversación se abrevia, se saltan el “protocolo” y van directo a: ¿cuánto te mide? ¿activo o pasivo? ¿tienes sitio? etc. Acompañada de fotos de la paloma del interlocutor (todos tienen una foto intima en sus dispositivos y no se mientan). Y ahí se rompe el curioso romance de descubrirle a la gente en vivo su genitalidad. Todos jugamos a ganar y no podemos perder el tiempo. Fíjense cuando les manden una foto del culo del otro.
Hermano! Hay que ser contorsionista para poder maniobrar ese teléfono y lograr ese click del orto. Yo de pana no soy muy flexible, por lo cual les aviso que fotos de mi colita no tengo!
El término “sitio” siempre me estresa. Nadie quiere comprometer el espacio donde vive. Siempre hay un poco de peligro vivas donde vivas, eso de recibir una visita de madrugada de alguien que no sabes quién es; pero hay gente a la que le gusta ese Rush.
Retomemos la historia del pana del barcito cool que conocimos. Decidimos salir con un man que no tiene hobbies, nos vestimos políticamente correctos para no levantar sospecha de quien realmente somos, y nos quedamos en esa mesa observando si es muy loca, si bota la segunda, si emplea la “S” al hablar, si se come la uñas y si algún día se leyó las reglas de urbanidad de Carreño. Jurando que uno es un ser humano supremamente perfecto. Pero eso no es de un solo lado. El tipo que te parece guapo, sentado frente a ti: te esta juzgando exactamente por las mismas cualidades que tu estas observando de él. Entonces aquello se vuelve una batalla campal. La única diferencia es que tu eres mas inteligente que el.
Luego te dejas de pendejadas y al cuarto Martini, lo invitas a tener sexo; lo cual no siempre fluye porque aparecen excusas insólitas… Entonces piensas: Pana! Yo te estoy invitando a que tengamos sexo; no a que te acuestes conmigo en la cama de un faquir…
Es que no se me ocurre un lugar mas insólito para follar que esa cama de clavos. Si la idea de tener sexo es sencilla y además placentera; porque hacerlo complicado y de manera tan estupida.
Por favor cuando no les guste alguien díganselo de frente. No hay forma de suavizar ese juicio. ¡No te gusta! Y no te va a gustar, por mas que trates.
No puedes hacer nada al respecto; pero por favor sean honestos; porque si no lo hacen, los van a putear y después no digan que no se los advertí.
El “no me gustas” te ahorra horas de teléfono con cuanto amigo paño de lagrimas tienes intentando deliberar en que fallaste. Además el sentirnos culpables, y esa horrible esa sensación de flajelamiento.
Amigo: No fallaste! Saliste con un imbecil.
Ya uno ha pasado por el desagradable y humillante test de cualquier tipo de preguntas cada una mas difícil que la otra y a decir verdad ambos estamos bastante agotados.
Pero esta vez funcionó! Te levantaste al man y te dijo que si. Chamo: ¡Coronaste!
¡Una vez que la cosa decide evolucionar nos vamos a la cama!
Si tienes suerte y el tipo es nice te lo llevas para algún “sitio” , no sabes si el tuyo o el de el pero se van.
De cualquier forma hacemos un “share location” al mejor amigo para informarle donde estamos localizados geográficamente por cuestiones de seguridad. Tu amigo se acaba de enterar que estas en una de follar y te empieza a enviar mensajes como: ¿Estás de brinquitos no? ¿Cuéntame como es? ¿De cual app salió? Y uno responde hablamos luego, pero tu amigo insiste hasta que apagas el teléfono porque estas frente al tipo que te costo 2 semanas de mensajes de texto, varias conversaciones telefónicas, unos Martinis, la mitad de la cuenta en un bar caro y una cita muy difícil para poderte ir a follartelo… Además te preguntaron el signo zodiacal, y creíste que no te importó.
Al otro día! La opción de despertarte y largarte esta a una puerta de distancia y lo que sigue es llamar a tu mejor amigo y decirle: Chamo ¡anoche la cague! O Chamo ¡anoche estuvo fantástico!
Si la cosa estuvo cool y decides volver a llamar a este chico sencillamente NUNCA mas te va a atender.
Es que el asunto es: NO HAY FINAL FELIZ ¡Nojoda!
Miren, si uno aclara que esta buscando a alguien con un poco de sentido del humor parece que uno estuviera siendo extravagante. Exigiendo una vaina del mas allá, de otra dimensión o de un universo paralelo desconocido. Por lo tanto nadie te va a parar bolas.
Es ese miedo a la inteligencia lo que realmente los aleja porque al final son unos básicos de mierda.
Que hay de malo en tener un amante solidario, al que no le exiges nada mas que sexo y de repente una pelicula de Netflix si el tiempo de ambos lo permite…
En una app muy poco se concreta. Y así pasa uno todos los días, tardes, noches y madrugadas… Abriendo perfiles, revisando quien visitó el perfil de uno. Preguntándonos si luce asi de guapo, cuantos filtros tiene esa imagen. Y se describe de esa manera ¿Porqué no le dio like a la foto de uno? Nadie dice un hola que tal!
Entonces volvemos a sentirnos culpables, fracasados y peor aun seguimos buscando en nuestros archivos la maldita foto perfecta que usamos como carnada y que nunca vamos a encontrar.
Marcos Durán
@marcdur
